BOLETIN INFORMATIVO

*ELABORAN ESTUDIANTES DEL IPN HARINA ALTAMENTE NUTRITIVA

Por AURORA CORDERO PEREZ

(AGENCIA NOTISIFA) Estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) elaboraron harina para preparar diversos alimentos, enriquecida con zanahoria y betabel, la cual constituye un producto altamente nutritivo que contribuirá a mejorar la dieta de los mexicanos, toda vez que contiene vitaminas A, B, C y E, además de minerales como: potasio, sodio, magnesio, calcio y hierro, fibra e hidratos de carbono.

Las alumnas de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB), Edith Mancilla Montiel, Lorena García Salazar, Margarita Cadena Escutia y Luz Elena Araiza Maldonado, son las autoras de la harina que constituye una aportación importante, toda vez que en el mercado no existe ningún producto similar, pues las harinas comerciales están orientadas a la repostería.

Mancilla Montiel señaló que la idea de desarrollar este producto surgió para incrementar el consumo de vegetales, porque consideraron que como consecuencia de la vida agitada de las ciudades, la población ha disminuido el consumo de los mismos y es necesario promover su ingesta, porque son esenciales para que el organismo realice adecuadamente sus funciones.

“La harina desarrollada en el IPN puede ser utilizada para preparar hot cakes, que son altamente consumidos por la población mexicana; entonces consideramos que podría funcionar para preparar este alimento”, afirmó.

Señaló que se eligió la zanahoria porque tiene un aporte de vitaminas, minerales, carotenos y fibra en cantidades abundantes, mientras que el betabel es un vegetal que, a pesar de ser altamente nutritivo y rico en vitaminas, minerales e hidratos de carbono, es poco consumido por la población.

La estudiante del noveno semestre de la carrera de Ingeniería Bioquímica afirmó que además de los aportes vitamínicos y minerales, la harina incide en una buena digestión, por el alto contenido en fibra de ambos vegetales.

Mancilla Montiel explicó que para obtener la harina de los vegetales, primeramente se lavan y desinfectan, posteriormente se someten a un proceso de deshidratación osmótica, a fin de separar la harina y parte de los pigmentos para llevar a cabo la molienda. “Cuando se obtiene la harina de zanahoria y betabel, se adiciona a la harina de trigo y se mezclan en forma homogénea hasta obtener el producto final”, detalló.

La alumna politécnica aseguró que la consistencia del alimento es la misma con la que se preparan los hot cakes convencionales; de acuerdo con las pruebas sensoriales realizadas, el alimento tiene un sabor agradable al paladar, no contiene conservadores y tiene una vida de anaquel de cuatro meses.

Mencionó que para complementar la preparación del alimento y con el propósito de aprovechar los vegetales en su totalidad, elaboraron además jarabes de betabel y zanahoria, mismos que pueden emplearse para recubrir los hot cakes al momento de servir.

Por último, el grupo de estudiantes manifestó que están dispuestas a transferir la tecnología para que alguna empresa interesada comercialice este producto.