*DEMOCRACIA PURA EN MÉXICO: “LIBRO BLANCO” DEL IFE
*VIZCARRA Y ALFREDO VILLEGAS, RECTA FINAL EN SINALOA
*CUENTA 2007, OSCURO DESTINO DE 60 MIL MILLONES DE PESOS
*VIZCARRA Y ALFREDO VILLEGAS, RECTA FINAL EN SINALOA
*CUENTA 2007, OSCURO DESTINO DE 60 MIL MILLONES DE PESOS
POR JORGE VELÁZQUEZ
(AGENCIA NOTISIFA) ¿SE ACABARON LAS FRAUDES electorales en el país? ¿Por fin, México vive la más pura democracia? Sí, es la respuesta que da el máximo órgano arbitral, el Instituto Federal Electoral (IFE), a cargo de Leonardo Valdés Zurita, en su famoso “Libro Blanco”.
Y en efecto, como su nombre lo indica ni siquiera la reñida elección del 2006, en donde los perredistas se dijeron robados y despojados de la Presidencia de la República y que sirvió de base al peje Andrés Manuel López Obrador para llevar a cabo toda una serie de movilizaciones, ni tampoco los procesos que se presentaron en otras entidades, tuvieron mácula de acuerdo al citado libraco.
El asunto de que no haya autocrítica es tan delicado que uno de los personajes del PRI, el diputado César Augusto Santiago, señalado junto con el ahora perredista Jesús Guadarrama durante años en muchas notas informativas, artículos, como experto “alquimista electoral”, acaba de levantar su queja en contra del “Libro Blanco” y solicitar la comparecencia del ex maestro de la UAM, Leonardo Valdés, en la Cámara Baja.
Es decir, hasta el propio César Augusto, hace notar que sí hubo irregularidades en los procesos electorales.
Según la información proporcionada por el Grupo Parlamentario del PRI, el chiapaneco dice que en el documento no existe esbozo alguno de autocrítica, a pesar de que hubo errores y omisiones en materia de radio y televisión, así como en el desahogo de las quejas mediante los procedimientos especiales sancionadores.
De esta manera, el legislador priista refirió que se habla de graves deficiencias mostradas por el IFE que no fueron recogidas en el libro blanco, pues de las 355 quejas que presentaron los partidos, en cerca de 250 casos el instituto determinó no revisar el fondo, por considerarlas improcedentes, e incluso que de los 20 recursos de impugnación que presentaron los partidos contra la decisión de la autoridad, el máximo órgano electoral del país los perdió todos y fue necesario reponer el procedimiento y realizar las indagatorias ordenadas por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Llamó la atención del chiapaneco que casi el 70 por ciento de las quejas presentadas por los partidos no hayan tenido los elementos mínimos para que se determinara investigarlas a fondo, y que en el balance de la aplicación de la reforma de 2007 tampoco se refiere que en más de 80 por ciento de los casos el procesamiento de las quejas rebasó los cinco días fijados por la ley.
Por ello, y por mucho más, César Augusto presentó un punto de acuerdo a fin de inquirir o indagar la conveniencia de reformas que transparenten la rendición de cuentas, el papel del contralor general, más aún su vinculación en el proceso con el órgano de fiscalización superior de la federación. “…se ha señalado que el papel del IFE en las tareas de arbitraje no fue sustancial en la polémica elección presidencial de 2006 ni en los pasados comicios intermedios, por lo que el instituto no puede ampararse en los resultados y la participación ciudadana para justificar su actuación”, advirtió el legislador y, por supuesto, que tiene mucho de razón…
EN SINALOA LA CUESTIÓN electoral está al rojo vivo. Los principales actores políticos se mueven para ocupar la silla que dejará vacante el Chuy Padilla y que su partido, el PRI, ostentan desde siempre. Las actuaciones de dos representantes de este partido, el presidente municipal de Culiacán Jesús Vizcarra y del coordinador de los diputados federales, Alfredo Villegas Arreola, los colocan en la punta de la nominación priísta. De un lado está el dinero, el poderío económico de un presidente municipal y próspero empresario que desde ese “modesto” cargo pelea la candidatura; del otro, está el poder político, el trabajo en la Cámara de Diputados, que lo ha llevado a la Vice coordinación del PRI.
Las relaciones que Alfredo Villegas Arreola sostiene con la más alta cúpula del PRI y de los que deciden finalmente quién vá, cuál es el mejor prospecto para que en un momento de raras coaliciones, como esa del PRD-PAN, el candidato priísta garantice el triunfo en una entidad difícil y violenta pero con gran poderío productivo.
Así las cosas, Vizcarra organiza con la Federación Nacional de Municipios de México (FENAMM), una Reunión Nacional sobre el Programa de Pavimentación Municipal, pero Villegas Arreola, con su labor política, le allega más recursos federales a su entidad. La pelea, luego entonces, es de pronóstico reservado y más le vale al PRI encontrar al idóneo so pena de dejar en manos de la oposición, que quiere llevar el apellido Clouthier a las próximas elecciones del 4 de julio, esa poderosa entidad…
ALEJANDRO GERTZ Manero, el inquieto diputado federal por Convergencia, sigue dando de qué hablar en la Cámara Baja. Lo mismo propone reformas al sistema de seguridad que critica la labor legislativa. Ayer, por ejemplo, volvió a salir a la palestra para proponer auditar las Cuentas públicas de años en curso.
En su iniciativa, Gertz Manero señaló que es la Auditoria Superior de la Federación, donde reside la responsabilidad de exigir la rendición de cuentas y fiscalizar el gasto público para garantizar que el manejo de los recursos y su honesta administración respondan a los intereses de la sociedad. “La Auditoría Superior de la Federación (ASF), nos ha hecho llegar el informe del año 2007 diciéndonos que solamente se logró auditar el 11 por ciento de las partidas presupuestales; con ese 11 por ciento hubo observaciones por 60 mil millones de pesos y solamente se pudieron recuperar de ellos, 2 mil millones”, explicó.
El legislador federal aseguró que es necesario mantener un sistema de auditoría constante del ejercicio que se está llevando a cabo en este momento para que existan posibilidades de poder presupuestar el año siguiente, ya que no hacerlo así impediría un gasto público eficiente y que funcione. “Nada más para que se den una idea: de los 60 mil millones, el 11 por ciento del presupuesto, sería, en el caso de que se hiciera una auditoría del 100 por ciento, más del 30 por ciento del presupuesto ejercido, cinco veces más de los impuestos que ahora nos han aumentado. Esto no es razonable, no es justo y nos están impidiendo hacer una verdadera tarea de presupuesto”, señaló y ahí están los números…NOS LEEREMOS LA PRÓXIMA ENTREGA…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario