ACTA DIURNA

*“CUANDO TE MANDEN A TIZNAR A TU MADRE, CHECA LA FUENTE NO VAYA A SER UNA VOLADA”: RENÉ ARTEAGA (REPORTERO)

A FIDEL SAMANIEGO, ENVIADO ESPECIAL

Por Xavier Méndez Camacho

Conocí a Fidel Samaniego hace 31 años. Fidel era reportero del Universal Gráfico y este tecleador era reportero de “El Universal el Gran Diario de México”. Aunque era la misma empresa había gran diferencia pues el primero era dirigido por don Manuel Mejido y el Gran Universal por don Ariel Ramos.

Ambos legendarios periodistas y durísimos como directores. El Gráfico aunque con muchos años de impreso era el hermano menor del Gran Diario. Don Manuel había sido reportero estrella de Excélsior y dirigía el Gráfico con menos personal pero con gran entusiasmo y profesionalismo. Don Ariel era reconocido por su dura línea editorial y por ser Gran Capataz de los reporteros. Todo mundo le tenía miedo. Pero cómo se aprendía.

Llegar al Gran Universal era, entonces y ahora, todo un mérito pues había que pasar por riguroso entrenamiento en la calle y en redacción y solamente “los elegidos” llegábamos ahí. Fidel, junto con Enrique Sánchez Márquez, ahora directivo de la revista Impacto quería brincar al Universal grande y para ello competía en serio con la planta de reporteros del Gran Universal. Recuerdo cómo nos peleábamos las primicias.

Aunque siempre fuimos buenos amigos en la calle éramos terribles adversarios. Los dos cubríamos la fuente de sucesos de policía, para llegar a un accidente corríamos, nos subíamos en ambulancia, en patrulla, en lo que fuera. Había verdadera pasión. Lo importante era llegar primero y ganar la nota. Teníamos hambre de sobresalir y conseguir la de “ocho columnas”. Era divertido porque al siguiente día había decepción o satisfacción.

Tres formas de publicarse nuestra información: como de “ocho columnas”, lo que llaman ahora de portada; de “ocho cuadratines”, es decir una nota chiquitita, o directamente con el “reportero Al-Cesto”. Es decir, la información reporteada y escrita se iba al cesto de la basura por ser –verdaderamente- una cochinada. Pero el oficio se aprendía día a día manchando las planas de los diarios. A Fidel lo recuerdo delgado, narigón, entusiasta y bohemio –todavía no perdía el cabello- y por las tardes, después de acabar nuestros textos no faltábamos a la cantina La Universal de las calles de Bucareli, en “La esquina de la información” para comentar, en medio de sabrosos tragos, los sucesos del día. Esa cantina era legendaria.

Los más celebres periodistas y caricaturistas de diversas épocas la frecuentaban. En su momento fue centro de reunión de Carlos Denegri y Agustín Barrios Gómez. Contaban que un día Carlos Denegri entró a caballo, sacó la pistola y echó tiro para regocijo de los presentes. Fidel y yo salíamos de la cantina casi a la medianoche después de “tratar de componer el mundo”.

Convivíamos con muchos reporteros que ahora son directores de medios, conductores y columnistas respetados: Joaquín López Doriga, Fernando Meráz; Guillermo Cantón Zetina, Agustín Granados, Ricardo Garibay, los caricaturistas Marino, Naranjo, Eduardo del Río (Ríus) y hasta –por qué no- Ruben “El Púas” Olivares.

Fue una época dorada para todos nosotros que todavía muy jóvenes disfrutábamos el oficio. Fidel llegó a El Universal y creció profesionalmente ahí. En esa época el reportero de crónica más conocido, que no el mejor, era Miguel Reyes Razo, de Excelsior.

Toda una “vaca sagrada” como decíamos en el medio a los ya consagrados. Fidel, años después ocupó su lugar como verdadero artista de la crónica en la Cámara de Diputados y en general en la “fuente” política. Ahora Fidel está muerto. Un ataque cardiaco le segó la vida cuando se encontraba de vacaciones en Veracruz junto con su familia. Cuando me lo dijeron me quedé asombrado pues gozaba de cabal salud. Entonces me acordé de una frase que decía otro reportero igual de valioso ya fallecido, el buen René Arteaga. Decía: “cuando te manden a chingar a tu madre checa la fuente no vaya a ser una volada”. Desgraciadamente en esta ocasión la noticia fue auténtica. Fidel Samaniego ya no está con nosotros y que mejor homenaje a nuestro amigo que mandarlo de “enviado especial” al Más Allá. Fidel Samaniego Reyes nació en el Distrito Federal en 1953, realizó estudios de Derecho en la UNAM y en la Escuela Libre de Derecho, así como de periodismo en la Escuela Carlos Septién García. En 1989 recibió el Premio Nacional de Periodismo en el género de crónica. Fue autor del libro Las entrañas del poder (1994).

NOTICIAS DEL IMPERIO.- ¿Dinosaurios en Xplor? Dos réplicas de dinosaurios, piezas paleontológicas y fósiles originales pertenecientes a la exposición “Huellas de la Vida” que se presentó en 2009 en el Zócalo de la ciudad de México, podrán apreciarse nuevamente del 9 de julio a finales de octubre en el parque Xplor, Quintana Roo México, en el marco de la celebración de su primer aniversario…

Un acuerdo con el Museo del Desierto de Coahuila permitió traer estas piezas en el marco del primer aniversario de operaciones de Xplor. La exposición abarca la última etapa del Cretácico Superior (hace 70 millones de años) y la Era del Hielo.

Arturo González, director del Museo del Desierto de Coahuila, quien se encuentra en Xplor junto con su equipo de investigadores, destacó también la importancia de que esta exhibición tenga como escenario las sorprendentes grutas de la Península de Yucatán, sitio estrechamente ligado a la desaparición de los dinosaurios a causa de la colisión de un asteroide de 10 km de diámetro en el área conocida como Chicxulub, al norte del estado de Yucatán.

Agregó que así como en el norte de México existe un gran tesoro paleontológico, también en el sureste de México lo hay, particularmente en los cenotes y cavernas cubiertas de estalactitas, fósiles marinos y restos de la vida que pobló esta tierra hace miles de años.