martes, 23 de diciembre de 2008

TORNADO POLITICO

*INSERTINDUMRE DESDE AHORITA PARA EL 2012.
*GOBERNANTES CORRUPTOS DE ALLA EUA Y DE ACA.
*CHARLAS DE CAFE.

Por: Arturo García Gil

A los dirigentes del PRD y del PAN no les calienta ni el sol. Es tanta su angustia que ya están en pláticas Germán Martínez, el anti carismático dirigente del blanco pintado de azul, y el desprestigiado líder del PRD (los chucho), Jesús Ortega, con el fin de hacer un solo frente y bloquear al PRI en sus intenciones de llegar a la presidencia en el 2009, previos triunfos inobjetables en el 2009.

Andan mal, desde luego, estos dos partidos. Sabemos que el PAN no ha podido hilvanar u obtener una victoria electoral desde que le ganó a Andrés Manuel López Obrador en las elecciones del 2006. Por cierto que el PAN apenas pudo salir adelante con una mínima y discutida ventaja, que todavía mantiene la duda de si hubo, o no, “mano negra” o “chanchullo” en esta elección, dada la conducta del ex presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, defensor de los resultados a capa y espada. Hace unos días presentó un libro que dice de su autoría en la Feria del Libro en Guadalajara, en cuyo acto tuvo que salir por la puerta trasera, ante la furia de los asistentes, como reflejo de aquellos sucesos de la elección presidencial.

El libro lleva el título “Así lo viví”, por lo que se agrega a los aprendices de escritores de la nueva generación de neófitos en la materia que pretenden la inmortalidad, que ya la obtuvieron por su manera inmoral y corrupta de ser, como el “hebilludo” de San Cristóbal y su mozo de espadas, el misionero de la ruta de Santiago, a la que acude cada año para expiar sus traiciones políticas.

Los Martínez y los Ortega están ocupados ahora en enfocar sus baterías en contra de Enrique Peña Nieto, gobernador del Estado de México, a quien culpan del avance del PRI en los últimos años y al que consideran como el precandidato más adelantado para alcanzar la primera magistratura en 2012, y a los cientos de millones que gasta en la contratación de estrellas de cine para su estrategia electoral, los cuales, naturalmente, salen del erario público.

En el análisis de esta alianza del agua y el aceite, por aquello de sus ideas encontradas en el ejercicio de la política, podemos llegar a la conclusión de que son planes desesperados.

El PAN se desmadeja con las contundentes derrotas que ha sufrido en los últimos dos años, desde Yucatán a la fecha, en que salió trasquilado Manuel Espino, ahora convertido en el principal enemigo de don Germán, siguiendo la línea que le ha marcado Vicente Fox. No descansa desde entonces el dirigente panista y pocas veces puede conciliar el sueño, pensando en lo que le espera si no entrega buenas cuentas a su jefe Calderón, que se jugó el todo por el todo al entregarle el mando del partido oficial.

El PRD, después del cochinero de sus elecciones internas y el comportamiento ilegal del IFE, que se metió, indebidamente, en la vida interna de este partido, con el fin exclusivo de marginar a AMLO, obstáculo principal para que el partido del sol se convirtiera en peón de la presidencia de la república y poder manipular las elecciones venideras, en favor del partido que tiene metido a México en la peor crisis de su historia, sin considerar el problema económico mundial que está por golpearnos severamente.

Las ganancias del PRI en su participación política no están fundamentadas en las actividades de Peña Nieto. Es el resultado de una sabia y atinada dirección de Beatriz Paredes Rangel, cuya habilidad y experiencia han reafirmado al tricolor como el venero de hombres capaces de dirigir a la nación, sin los fracasos y errores de Fox y la deficiente conducción que la ha imprimido la presente administración pública federal.

Pretender adjudicar los méritos a un gobernador, por mejor que sea y por más presupuesto de que disponga, es negar la realidad de la intervención que ha tenido en esta restitución del poder político, la ciudadanía, que le ha dado millones de votos al PRI.

Y esta es una maniobra de los panistas y perredistas, para dejar la impresión de que el Invencible, que ha recuperado con creces este calificativo, está en manos de un solo hombre, lo que será desmentido en su momento por el propio interesado, cuyos dardos de la intención de los dos partidos, es ganar a como dé lugar, aunque sea mediante el usufructo del poder presidencial que no ha ocultado su interés en mantener a su partido en el poder.

Pero también existe mi opinión personal al respecto y tiene la misma validez que la de cualquier otro ciudadano por más importante que sea, ya sea líder político, dirigente sindical o miembro del PRI, del PAN o del PRD, particularmente de estos dos últimos que se creen la divina garza, como decía un viejo y connotado maestro. Presumir que los dos pueden con López Obrador y con las mayorías que lo acompañan, es vivir en la luna y creer que es de queso. Vale más que se vayan acostumbrando a tener siempre la ayuda del IFE y el respaldo de Los Pinos, para sobrevivir. Si no es así, estarán irremediablemente perdidos.

Finalmente no me queda más que decir y opinar que la alianza del PRD y el PAN no tienen como objetivo únicamente a Enrique Peña Nieto, sino que es una carambola de tres bandas. Pretenden anular en sus aspiraciones presidenciales a dos sonorenses que andan bien metidos en el negocio político nacional, con la idea de llevar al PRI, nuevamente, a la presidencia de la república, sacando al blanquiazul a patadas, como diría el deschavetado de Fox, según el decir y el sentir del Vaticano, en cuanto a su condición mental.

Están fuertes los contendientes. Manlio Fabio Beltrones Rivera y Eduardo Bours Castelo no son peritas en dulce. Ya tienen lista su estrategia y se defenderán como los buenos. La experiencia del primero va por delante, mientras que la tenacidad del segundo puede hacer el milagro, más el novio comprometido que tiene el dinero a sus pies, para comprar conciencias de los que venden su alma al diablo, como aquellos que salieron limpios del “cochinero” con un fallo de la suprema autoridad electoral.

CHARLAS DE CAFÉ .-Eí, estimado lector, en un acto de justicia que mucho honra al sistema, después de una averiguación contenida en 76 páginas las autoridades de Illinois fueron hasta la sede del Gobierno Estatal en Chicago y tomaron preso a Rod Blagojevich, gobernador de esta entidad, bajo cargos de corrupción. El gobernador, como muchos otros políticos de todas las latitudes y todas las naciones, no se conformaba con ser la máxima autoridad de su estado, sino que desde ahora pensaba ser candidato a presidente en 2016, lo que no fue obstáculo para que se comportara como un vulgar revendedor.

¿Cuál fue el delito por el que cayó y fue detenido?, simplemente, al saber que el escaño de senador que ocupó un tiempo Barack Obama Husein “Bin Laden” quedaba vacante, ¡lo puso en venta al mejor postor; y podemos imaginarlo en su elegante oficina de Gobierno, hablando por teléfono con un posible candidato: “-No, amigo, Fulano de tal ya me ofreció tantos dólares, ¿cuántos me puedes ofrecer?”. Eso es corrupción, que fue descubierta, analizada, juzgada, y llevó a la detención de Blagojevich.

¿Es esto una muestra de cómo funciona la justicia?, sí y no; sí, porque para todos los norteamericanos, el que un gobernador sea llevado a la justicia por un delito confirma que “nadie debe estar por encima de la ley”, pero no, porque como dijo Robert Grant, agente especial de la FBI (Buró Federal de Investigaciones) “Illinois no es el estado más corrupto de los Estados Unidos”, lo que quiere decir que en todos lados hay corrupción, y con ella, impunidad. Pero, estimado lector, Yo Ciudadano me pregunto: ¿podrá suceder algo así en México?

Tenemos a un gobernador, Mario Plutarco Marín Torres “10”, que fue grabado amplísimamente y exhibido a nivel nacional e internacional, cuando conversaba con un pederasta que le agradecía la detención de Lydia Cacho, quien había denunciado los casos de tráfico de menores en Yucatán…y no pasó nada. Tenemos a otro, Arturo Montiel Rojas, aquel que prometió “limpiar de ratas” su Gobierno, a quien se le documentaron lujosísimas propiedades tanto en el país como en el extranjero, valuadas en millones de euros, -con un sueldo de 108 mil pesos mensuales-: y...no pasó nada.

Que me cuenta del Alcalde De extracción priísta Ariel Peña Colín, aquel que acusan de robarse gasolina de los ductos de PEMEX, allá por Acambay Estado de México ¡¡¡Adivine qué es su primo!!!

Y qué me dice usted de Arturo Zamora, alcalde priista de Zapopan, investigado por la DEA por sus posibles nexos con el narcotráfico, y el otorgamiento de licencias de construcción sin licitación, un supuesto fraude al IMSS y otras lindezas…: no pasó nada. Otro más, denunciado públicamente en los diarios por la Cámara Nacional de Desarrolladores de Vivienda, Adalberto Madero, alcalde de Monterrey, que intentó extorsionarlos en el otorgamiento de permisos para el desarrollo urbano, así como en el otorgamiento irregular de contratos publicitarios en puentes peatonales… no pasó nada.

Podemos seguir la lista, y usted, estimado lector seguramente sabe de casos de violaciones a la ley de funcionarios pequeños y grandes, violaciones que nunca han sido ni será castigadas. El presidente de México ha pedido que se denuncien, afirma que tenemos que vivir en un país de leyes; ojalá esto sea cierto, y si nosotros podemos contribuir con nuestras denuncias, lo haremos, porque queremos vivir en un país digno.

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