lunes, 14 de septiembre de 2009

BOLETIN INFORMATIVO

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¿CAMBIOS PROFUNDOS?

Lic. L. René Martínez Souvervielle Rivera

(AGENCIA NOTISIFA) El mensaje que dio el Presidente Calderón, en Palacio Nacional, el pasado día 2, en cuanto a su forma, resultó una buena pieza de oratoria, modulada y que buscó impactar a los asistentes.

En cuanto a su contenido, dejó traslucir impaciencia, enojo y en algunos momentos, ansiedad, pues el Presidente reconoció que a pesar de todos sus esfuerzos, no ha logrado resultados plenos ni satisfactorios. Se intuyen factores que han intervenido, como la falta de dinero, de respuesta poco rápida y eficiente de sus colaboradores y un sistema económico injusto.

Por ejemplo, el Presidente Calderón atribuyó como factores determinantes de la situación grave en que se encuentra el país, a la crisis económica mundial y a la pandemia de la influenza AH1N1.
Destacamos que la crisis financiera mundial, fue minimizada, con efectos de “un simple catarro” para México, cuando la realidad nos hace afrontar la crisis más severa que hemos tenido.

En cuanto a la entonces epidemia, el Gobierno Federal reaccionó en forma desproporcionada, al cerrar escuelas, negocios, industrias, restaurantes, cines, no a las reuniones multitudinarias, paralizando al país, con consecuencias tan funestas que aún estamos sufriendo.

Obviamente, fueron apreciaciones equivocadas y medidas desproporcionadas, que son atribuibles a los responsables de la materia en cuestión, del Gobierno Federal.

El Presidente Calderón, casi al final de su intervención, planteó y demandó la unidad, la cooperación, el diálogo y el apoyo de la ciudadanía, para avocarse a realizar un cambio profundo en las estructuras, fundamentalmente en el ángulo económico y político, para impedir que México, como país se frustre en su destino.

Planteamiento sorpresivo, que por la forma y momento en que se hizo, a mitad del período, ha generado reacciones de entusiasmo y de escepticismo.

El partido político, al que pertenece el Presidente Calderón, cree y aplica tesis económicas que se sustentan en “ la economía de mercado”, el libre juego de “la oferta y la demanda”, apoyo permanente al capital y facilidades y subsidios para la exportación, apoyos a la estructura bancaria, a la paridad de la moneda, que ha provocado en este país y en otros muchos, que los ricos se hagan más ricos y provocando el incremento terrible de la miseria, de la pérdida del empleo, y aumento en el costo de la vida, afectando a las grandes mayorías de la población.

De allí, que nos formularíamos la siguiente reflexión:

Al hablar el Presidente Calderón de cambios profundos, ¿ se referirá a modificar sustancialmente el enfoque de la economía?

¿Será objeto de la nueva política económica, el apoyar a los millones de campesinos que cuentan como máximo 5 hectáreas, dándoles la atención debida, la asesoría técnica, y el apoyo económico necesario, semillas mejoradas y los fertilizantes necesarios para que puedan hacer producir su parcela y cosechar los alimentos indispensables para abatir la pobreza alimentaria que sufre la mayoría del pueblo?
¿Podrá decidirse el Presidente, a apoyar a PEMEX, a través de su nuevo titular, iniciando la perforación de pozos en tierra firme y eficientar su operación, o se pretenderá nuevamente, el abrir puertas al capital privado, que a su manera de ver es la única solución?

Es de destacar, la celeridad con que el Presidente Calderón, removió a los titulares de la PGR, de la SAGARPA y de Pemex, remociones que por el poco tiempo que resta a su administración, tienen que responder con eficiencia y con absoluta entrega a su responsabilidad. La desaparición de la SRA, de la Función Pública y de Turismo, que pasa a incorporarse a la Secretaría de Economía, como también los recortes presupuestarios en gastos, viajes y prebendas, que según el Presidente Calderón, representan estos renglones como 80,000 millones de pesos, de ahorro.

¿Podrá sustituir a los actuales titulares de la PFP, de Economía, de Hacienda, de la SEMARNAT y de Comunicaciones, que bajo la apreciación de la ciudadanía, deben de estar estas dependencias manejadas por personas que sepan que hacer y como hacerlo, independientemente de actuar con lealtad y entrega en beneficio de México.

¿Estará el Presidente, dispuesto al diálogo con el Congreso de la Unión y establecer relaciones respetuosas mutuas, para instrumentar nuevas leyes, reformar algunas de las ya existentes, que permitan fundamentalmente que coman los que no pueden hacerlo y trabajo para los que no cuentan con él, para que dichos núcleos puedan salir del hoyo en que se encuentran?

¿Podrían dejarse de lado los programas asistenciales, tanto porque no resuelven el problema de fondo y también porque México no cuenta con el dinero suficiente para atender al 100% de los más de 50,000,000 de mexicanos en pobreza extrema que existen?
¿Podrían en sustitución de los programas asistenciales, crearse programas de financiamiento para que esa población menesterosa, reciba los apoyos y recursos necesarios para la generación de empleos, estructurar una economía popular fuerte, creándose la dinámica necesaria, para salir de la problemática en que se encuentran?
En cuanto a la calidad de la educación, el Presidente ha dicho “las plazas de maestro no se venden ni se heredan”. De la calidad de los maestros, depende que los estudiantes puedan superarse.

¿Será factible, que el Presidente logre la reunificación del gremio magisterial, aceptando éste, que los maestros, todos, se preparen y se evalúen sus conocimientos y en forma democrática, se puedan eliminar liderazgos nefastos, corruptos, que están dañando profundamente al país?

Son muchos retos, múltiples aspectos a corregir, lo que posiblemente podrá colocar a Felipe Calderón, en situación incómoda dentro de las mismas filas de su partido. Lo consideramos una persona de buena fe y con deseos de dejar huella en su Presidencia. Ojalá que con sensibilidad y diligencia pueda lograr sus propósitos y que éstos sean los que quieran los mexicanos.

Nos queda una duda, sin embargo, puesto que el mensaje de Felipe Calderón ya pasó, pero apreciamos que se han multiplicado los spots televisivos y se han creado hasta programas específicos, “Diálogo Ciudadano”, estructurado con preguntas del público asistente, espontáneas o inducidas, pero contestadas personalmente por el Presidente de la República. Es manifiesta la intención de cimentar la popularidad del Presidente Calderón.

¿Se estará preparando el terreno, para aparecer el Presidente como víctima, en previsión de que no logre a su gusto, los cambios profundos que señaló en su “decálogo”?

En breve conoceremos las iniciativas de ingresos y egresos que serán puestos a consideración del Congreso para el año 2010. Por esos documentos, sabremos si se plantean novedades fiscales para erradicar, en principio, la pobreza extrema y la urgente generación de empleos o bien nos encontraremos con los criterios tradicionales del Gobierno Federal, resultando “más de lo mismo”, en perjuicio de la economía raquítica de la gran masa, con la creación de nuevos impuestos.

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